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Sencillez, sabor y autenticidad. La pasta al aglio e olio (ajo y aceite) es uno de esos platos que demuestran que, cuando los ingredientes son de calidad, no hace falta complicarse para disfrutar de una receta deliciosa con aceite de oliva virgen extra como Los Tres Manantiales. Originaria de Nápoles, esta preparación se ha convertido en un clásico imprescindible de la cocina italiana… y también de muchas cocinas españolas.

Hoy te enseñamos cómo prepararla en casa con el toque que marca la diferencia: el uso de un aceite de oliva virgen extra como Los Tres Manantiales, que potencia el sabor del ajo, realza la textura de la pasta y convierte este plato humilde en una experiencia gourmet.

Un plato humilde con alma mediterránea

La historia de la pasta al aglio e olio se remonta a siglos atrás, cuando en muchas casas italianas se cocinaba con lo que había disponible: ajo, aceite, un poco de guindilla, y pasta seca. Nada más, nada menos. En un contexto de escasez, esta receta representaba el ingenio de una cocina que sabía extraer lo mejor de ingredientes básicos.

aceite de oliva virgen extra

Y es que esta receta no necesita adornos. Su esencia está en el equilibrio perfecto entre la pasta al dente, el ajo dorado y el aceite de oliva virgen extra, que actúa como hilo conductor del sabor.

Por qué elegir aceite de oliva virgen extra Los Tres Manantiales

Aunque en Italia se suele usar aceite de oliva, muchas veces no se especifica su calidad. En España tenemos la suerte de contar con uno de los mejores productos del mundo: el aceite de oliva virgen extra, y si es de procedencia cuidada como Los Tres Manantiales, el resultado salta a otro nivel.

El AOVE Los Tres Manantiales, de extracción en frío y origen 100% natural, aporta:

  • Un sabor afrutado y equilibrado, ideal para acompañar sin enmascarar el resto de ingredientes.
  • Un aroma limpio y fresco, que realza el ajo y armoniza con la pasta.
  • Una textura fluida y estable, que se integra perfectamente con la pasta caliente.
  • Una riqueza nutricional superior, repleta de antioxidantes y ácidos grasos saludables.

En un plato donde el aceite es uno de los protagonistas absolutos, no se puede improvisar. Elegir un aceite de oliva virgen extra de calidad es clave para que cada bocado se convierta en un pequeño homenaje a la cocina tradicional mediterránea.

Los beneficios del AOVE en platos calientes

Hay quien piensa que el aceite de oliva virgen extra es solo para usar en crudo. Sin embargo, es perfectamente apto para cocinar, siempre que se respeten las temperaturas adecuadas. El AOVE:

  • Tolera bien el calor, gracias a su alto punto de humo.
  • No pierde propiedades fácilmente, siempre que no se queme.
  • Aporta estabilidad a los platos, evitando sabores rancios o ácidos.
  • Potencia el sabor natural de los alimentos sin necesidad de aditivos.

En la pasta al aglio e olio, el AOVE actúa como salsa natural. No se reduce, no se evapora, no se espesa. Simplemente cubre la pasta con una capa brillante y aromática que atrapa el ajo y la guindilla, y convierte un plato básico en una delicia.

Receta de pasta al aglio e olio con AOVE Los Tres Manantiales

Ingredientes para 2 personas:

  • 200 g de espaguetis o linguine
  • 3 dientes de ajo (laminados finos)
  • 4 cucharadas de aceite de oliva virgen extra Los Tres Manantiales
  • 1 guindilla seca o una pizca de chile en escamas (opcional)
  • Perejil fresco picado
  • Sal al gusto
  • Queso rallado (opcional, si quieres una versión más libre)

Preparación paso a paso:

  1. Cuece la pasta
    En una olla grande con agua hirviendo y sal, cuece los espaguetis hasta que estén al dente. Reserva un poco del agua de cocción (medio vaso) antes de escurrirla.
  2. Prepara el ajo y la guindilla
    Mientras se cuece la pasta, calienta el aceite de oliva virgen extra Los Tres Manantiales en una sartén a fuego medio-bajo. Añade los ajos laminados y la guindilla (entera o en escamas) y deja que se doren lentamente, sin que se quemen.
  3. Incorpora la pasta
    Cuando los ajos estén dorados, añade la pasta escurrida directamente a la sartén. Agrega un par de cucharadas del agua de cocción reservada y remueve bien para que el aceite impregne toda la pasta.
  4. Finaliza con perejil fresco
    Apaga el fuego, espolvorea con el perejil recién picado y remueve una vez más. Sirve de inmediato.
  5. (Opcional)
    Puedes añadir un poco de queso parmesano rallado si no buscas una receta estrictamente tradicional.

Consejos para un plato perfecto

  • Cuidado con el ajo: debe dorarse, no quemarse. Si se pasa, el sabor será amargo.
  • Usa pasta de calidad: mejor si es italiana o artesanal, con buena absorción.
  • El agua de cocción es clave: su almidón ayuda a emulsionar el aceite con la pasta.
  • La guindilla, al gusto: si no te gusta el picante, puedes prescindir de ella sin problema.
  • El perejil, siempre fresco: aporta color, aroma y equilibra el plato.

Por qué amar la pasta al aglio e olio

Este plato tiene todo lo que hace grande a la cocina mediterránea:

  • Ingredientes sencillos, pero bien seleccionados.
  • Una preparación rápida, que no necesita técnicas complejas.
  • Un sabor lleno de matices, que crece con cada bocado.
  • Una combinación de texturas y aromas que reconforta.

Además, es perfecto para una comida ligera, para improvisar una cena o incluso para agasajar a invitados sin complicarse demasiado.

Cómo darle tu toque personal

Aunque la versión clásica solo lleva ajo, aceite, pasta y guindilla, puedes jugar con otras combinaciones sin perder su esencia:

  • Con almejas o gambas: para un toque marinero.
  • Con tomates secos y albahaca: si quieres más color y frescura.
  • Con setas salteadas: ideal en otoño.
  • Con ralladura de limón: para un acabado cítrico y perfumado.
  • Con pan rallado tostado en AOVE: para un punto crujiente final.

Eso sí, recuerda que el protagonista sigue siendo el aceite de oliva virgen extra, y que cualquier adición debe respetar su protagonismo.

La pasta al aglio e olio es un homenaje a la cocina sin artificios. Una receta que nos recuerda que no hace falta complicarse para comer bien, y que el sabor auténtico está en los ingredientes y en la forma de tratarlos.

Prepararla con el aceite de oliva virgen extra Los Tres Manantiales es la mejor forma de mantener viva esta tradición mediterránea y de elevar un plato sencillo a una experiencia culinaria que sorprende por su pureza, su intensidad y su elegancia.

Anímate a probarla, a saborearla sin prisas, y a descubrir cómo algo tan simple puede ser tan exquisito.

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